Sykes-Picot o ¿Hasta donde ha influido Occidente en la deriva de Oriente Próximo?

Posted: Novembre 5, 2023 in Opinions
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Una de las cuestiones que más me inquieta desde hace años es la de tener la sospecha de que el destino de los pueblos de Oriente Próximo quizá podria ser distinto a no ser por la tremenda injerencia que Occidente ha practicado en la región. Últimamente, navegando entre lecturas de diverso tono, intento verificar si esta óptica, tan común en un amplio espectro de la izquierda, es correcta o no. Ante todo quiero aclarar que desde mi punto de vista nunca es posible achacar todos los males de una zona del planeta a un tipo de factor, en este caso endógeno o exógeno. Normalmente se juntan ambos factores. Lo que si que creo que es cierto es que a veces los factores exógenos pueden potenciar ostensiblemente a los endógenos, y este creo que podria ser el caso de esa zona de Oriente Próximo que tanto nos preocupa ahora.

Uno de los hitos históricos que se usa frecuentemente para determinar el cénit de la intervención occidental y para fundamentar a su vez los orígenes del caos actual, es el de los acuerdos llamados Sykes-Picot, urdidos entre Francia y Reino Unido después de la I Guerra Mundial a espaldas de los aliados británicos que luchaban por un estado árabe e independiente bajo el liderazgo del jerife de La Meca Husayn ibn Ali, contra el Imperio Otomano.
Acerca de la influencia que estos acuerdos han tenido en el devenir de la región hay puntos de vista encontrados. Recientemente hallé una perspectiva distinta e interesante en el blog «Iraq and Gulf analysis» https://gulfanalysis.wordpress.com/. El autor cuestionaba la influencia de dichos acuerdos sobre el territorio en base a diferentes argumentos.
El primer argumento consiste en plantear que los acuerdos de Sykes-Picot sólo dibujaban el reparto entre Francia y el Reino Unido de zonas estratégicas que eran por lo general costeras; la zona de Acre y Haifa, y la zona de Basora para los británicos, y la costa libanesa hasta el norte de Alejandreta en la actual Turquía para los franceses. Los intereses serían estratégicos de cáriz marítimo, pero también habría un interés francés en «proteger» a las comunidades cristianas de la costa mediterránea de la Gran Siria (intentaré hablar de esto en otro post en relación al controvertido Pacto Nacional libanés).
El segundo estaría relacionado con el hecho de que durante la anterior administración otomana la divisón provincial que existía (al menos en el último siglo) ya estaba dibujada sobre líneas muy similares a las marcadas por el reparto franco-británico. El dstrito del Líbano dataría del 1861, el de Jerusalén de 1870, y en cuanto a Iraq ya había sido separado administrativamente desde los inicios del Islam.
El tercero consiste en que muchos de los aspectos comtemplados en el acuerdo Sykes-Picot no fueron llevados a cabo. Así pues Mosul acabo en manos británicas en lugar de francesas, Alejandreta quedó en Turquía, los territorios alauitas quedaron bajo el control de Damasco, etcétera.
Y aún quedaría un cuarto mediante el cual se expone la debilidad del proyecto pan-islamista del Estado Islámico de borrar la frontera Iraq-Siria, frente a la importante resistencia de las poblaciones de un lado y otro de dicha frontera que persisten en la separación entre ambos estados.
En mi opinión, sin banalizar la cuestión, creo que el articulista omite algunos aspectos que son cruciales para entender el desafuero que supuso el acuerdo Sykes-Picot. Aunque este no llegara a implementarse al cien por cien en todo su detalle, como el señala acertadamente, si lo fué en una generalidad crucial, que fue la de negar la soberanía a la población local y engañar de una manera zafia al jerife de la Meca repartiendo el territorio en dos mandatos, francés y británico.
Curiosamente, en este análisis, se omite un estudio muy interesante realizado en aquella época e impulsado por el entonces presidente de EEUU Woodrow Wilson, y llevado a cabo por dos estadounidenses en 1919 conocido por el informe King-Crane. Este estudio dejó patente la voluntad de la gran mayoría de la población de que se creara una monarquia constitucional aglutinadora y respetuosa con todas las etnias, de carácter confederal o federal, liderada por el jerife de La Meca, que no guardaba ninguna relación de nigún tipo con las fronteras que de forma oculta negociaban en aquel momento Francia y Reino Unido, con el apoyo de Rusia.
«El informe King-Crane no resultó del agrado de franceses y británicos y se decidió mantenerlo en secreto hasta el 1922» (McHugo, 2014). En el se perfilaban cosas clave de una forma clara (y no me refiero a las recomendaciones si no a las voluntades locales captadas en base al estudio); El deseo a un estado totalmente independiente, el rechazo absoluto a un mandato francés, la voluntad de construir un estado sin privilegios favorables a ninguna confesión, el rechazo al proyecto sionista, la defensa de los derechos de las minorías, la oposición a la creación de un Gran Líbano…
Sin duda la propuesta del jerife de La Meca de constituir una «monarquía constitucional civil y democrática, con unos principios ampliamente descentralizadores y que salvaguardara los derechos de las minorías» (Hurewitz, 1987) era una gran novedad en la región e incluso en el mundo, pero vale la pena preguntarse donde estaríamos ahora si se hubiera facilitado el lanzamiento de ese experimento en lugar del propuesto en el Sykes-Picot.
Mi sensación, reconozco que subjetiva y carente de suficiente material académico de apoyo para proponerla como hipótesis, es que el imperio británico, el francés y EEUU, persiguiendo la defensa de sus intereses más mezquinos, han actuado frecuentemente (y siguen haciéndolo) siguiendo una especie de ley de Murphy geopolítica de carácter extremo. Si para mantener la hegemonía o cierto dominio en una región hay que apostar por una opción siempre se apuesta por la peor de ellas, agudizando de una forma brutal las tensiones y contradicciones de los territorios donde se interviene.
Algunas fuentes utilizadas:
McHugo, John (2014) «Syria, a recent history.» Saqi Books, London.
Hurewitz, J. C. (1987) «Diplomacy in the Near and Middle East. A Documentary Record 1535–1956. Cambridge Archive Editions.
The King-Crane Commission Report, August 28, 1919
Dammit, It Is NOT Unravelling: An Historian’s Rebuke to Misrepresentations of Sykes-Picot
Reidar Visser on Monday, 30 December 2013 2:25

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